El internet en la era digital del siglo XXI, ha transformado radicalmente la forma en que llevamos a cabo nuestras tareas diarias. Imagina un mundo donde tus dispositivos no solo obedecen tus comandos, sino que anticipan tus necesidades antes de que las expreses.
¿Sabías que el 73% de las personas ya están integrando la automatización en sus vidas cotidianas? Descubre cómo esta revolución digital está moldeando nuestro presente y futuro, llevándonos hacia un nuevo nivel de eficiencia y comodidad.
¿Qué es el internet de las cosas?
El término IoT, o Internet de las cosas, se refiere a la red colectiva de dispositivos conectados y a la tecnología que facilita la comunicación entre los dispositivos y la nube, así como entre los propios dispositivos. Gracias a la llegada de los chips de ordenador de bajo coste y a las telecomunicaciones de gran ancho de banda, ahora tenemos miles de millones de dispositivos conectados a Internet. Esto significa que los dispositivos de uso diario, como los cepillos de dientes, las aspiradoras, los coches y las máquinas, pueden utilizar sensores para recopilar datos y responder de forma inteligente a los usuarios.
El Internet de las cosas integra las “cosas” de uso diario con Internet. Los ingenieros en informática llevan agregando sensores y procesadores a los objetos cotidianos desde los años 90. Sin embargo, el progreso fue inicialmente lento porque los chips eran grandes y voluminosos. Los chips de ordenador de baja potencia llamados etiquetas RFID se utilizaron por primera vez para el seguimiento de equipos caros. A medida que se reducía el tamaño de los dispositivos informáticos, estos chips también se hacían más pequeños, más rápidos y más inteligentes.
¿Cómo funciona el internet de las cosas?
Un sistema común de IoT funciona mediante la recopilación y el intercambio de datos en tiempo real. Un sistema del IoT tiene tres componentes:
Dispositivos inteligentes
Se trata de dispositivos, como un televisor, una cámara de seguridad o un equipo de ejercicio, a los que se les dotó de capacidades de computación. Recopila datos de su entorno, de las entradas de los usuarios o de los patrones de uso y comunica los datos a través de Internet hacia y desde su aplicación de IoT.
Aplicación de IoT
Una aplicación de IoT es un conjunto de servicios y software que integra los datos recibidos de varios dispositivos de IoT. Utiliza tecnología de machine learning o inteligencia artificial (IA) para analizar estos datos y tomar decisiones informadas. Estas decisiones se comunican al dispositivo de IoT y este responde de forma inteligente a las entradas.
Una interfaz de usuario gráfica
El dispositivo de IoT o la flota de dispositivos pueden administrarse a través de una interfaz de usuario gráfica. Algunos ejemplos comunes son una aplicación móvil o un sitio web que pueden utilizarse para registrar y controlar dispositivos inteligentes.
Hogares conectados
Estos dispositivos en el hogar pueden desde mejorar la ciberseguridad de tu casa, cuidando cualquier movimiento o alguna anomalía que se presente en tu hogar, así como los detectores de humo loT pueden diferenciar el humo del cigarro, también pueden prepararte tu café, activar las bombas de riego de acuerdo a la humedad del pasto cuando esté la necesite, así como en los termostatos que siempre están al tanto de cuál es la temperatura adecuada para el momento en que ingresas a tu hogar y supervisar el uso de electricidad a través de enchufes inteligentes.
Ciudades Inteligentes
Las aplicaciones de IoT han hecho más eficiente la planificación urbana y el mantenimiento de las infraestructuras. Los gobiernos utilizan las aplicaciones de IoT para resolver problemas de infraestructura, salud y medio ambiente.
Edificios Inteligentes
Edificios como los campus universitarios y los edificios comerciales utilizan aplicaciones de IoT para impulsar una mayor eficiencia operativa. Los utilizan generalmente para reducir el consumo de energia, reducir costes en mantenimiento y utilizar espacios de trabajo de manera mas eficiente.
El Internet de las cosas tiene un amplio impacto en la vida y el trabajo de las personas. Permite que las máquinas se encarguen de las tareas más pesadas, se hagan cargo de tareas tediosas y hagan la vida más saludable, productiva y cómoda.
Por ejemplo, los dispositivos conectados podrían cambiar toda su rutina matutina. Al pulsar el botón de posponer, el despertador haría que se encendiera automáticamente la cafetera y se abrieran las persianas de la ventana. El refrigerador detectaría automáticamente los comestibles que se estén terminando y los pediría para su entrega a domicilio. El horno inteligente le indicaría el menú del día. Incluso es posible que cocine los ingredientes previamente preparados y se asegure de que su almuerzo esté listo. El smartwatch programará las reuniones mientras el coche conectado ajusta automáticamente el GPS para parar a recargar combustible. Las oportunidades son infinitas en el mundo del IoT.
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