También conocido como embudo de ventas, o embudo de conversión, es una representación gráfica del proceso del recorrido que comienza en donde un cliente conoce una marca hasta que se convierte en un cliente leal. Existen distintas versiones, y por supuesto, también podemos personalizar nuestro propio embudo de marketing. Pero comencemos con la versión simple del embudo de marketing que consiste en cuatro etapas, la conciencia, la consideración, la conversión y finalmente, la fidelidad.
CONCIENCIA
La conciencia es el inicio de todo, es cuando un cliente potencial ve la marca por primera vez. La audiencia conoce el nombre, mensaje, tono, estilo, valores y cultura de nuestra empresa. Esta etapa consiste en atraer a los clientes.
Existen distintas estrategias que nos pueden apoyar en el proceso de reconocimiento de marca, aquí te menciono algunas:
- Optimizar nuestro sitio web
- Anuncios de pago
- Alianzas promocionales
CONSIDERACIÓN
La consideración es la etapa en la cual la audiencia explora el negocio, comparan y buscan diferenciadores entre empresas distintas. La meta consiste en generar leads y que, eventualmente, realicen una compra.
Algunas de las estrategias que podemos implementar para lograr el proceso de consideración son:
- Involucrar a los clientes potenciales nuevamente
- Ofrecer contenido útil
- Brindar herramientas o periodos de prueba
CONVERSIÓN
La conversión es la etapa de decisión, en la cual realizan una compra. La meta es convertir clientes potenciales en compradores.
Esta etapa es crucial, ya que las empresas juegan un papel importante al ofrecer sus experiencias. Para que esta etapa sea exitosa, se deben tener contenidos claros y útiles.
Algunas de las soluciones para esta etapa son:
- Tener una página de producto detallada
- Realizar descripciones precisas de los productos
- Anuncios bien situados y centrados en el producto
LEALTAD
Algunos tipos de embudos de marketing suelen terminar en el momento en que se logra realizar la compra, sin embargo, una vez construida la relación con un cliente, es de suma importancia mantenerla.
Las interacciones positivas que se obtienen durante y después de una compra pueden influir en la decisión de un cliente para convertirse en cliente habitual o no. La fidelidad del cliente depende de la calidad y el valor del producto, así que, te menciono algunas de las medidas que se pueden utilizar para fomentar la lealtad:
- Interacciones en redes sociales
- Crear experiencias de compra sin dificultades
- Enviar correos de seguimiento
En resumen, el embudo de marketing es una herramienta fundamental que nos apoya en el momento de realizar o mejorar nuestra estrategia de marketing para aumentar las ventas. Es una pieza clave, ya que a través de este, logramos tener una visión más clara de nuestras áreas de oportunidad.
También es importante mencionar que, medir los resultados en cada etapa nos será de utilidad para comprender qué es lo que estamos haciendo bien, mal, o en qué área podemos mejorar. En otro artículo te cuento sobre las métricas aplicables a cada etapa del embudo.
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